viernes, 31 de diciembre de 2010

Lo mejor de 2010

En todos lados hacen listas y listas de lo mejor, lo peor, lo no tan peor, lo no tan mejor y así podría seguirle buscando forever and ever. Pero no lo haré. Lo que sí voy a hacer es mencionar las cosas más rescatables de mi año, porque aunque en general estuvo de la mierda, considero que es más sano rescatar lo bueno y no andar por la vida lloriqueando por lo que no fue, por lo que salió mal, por diversos traumas, etcétera, etcétera.

Pues bien, dejemos tanto verbo y vayamos al sustantivo.


Persona favorita

No importa qué hayan hecho o cómo hayan sido, todos fueron mi persona favorita este año.


Momento cómico favorito

Un mail que me mandó alguien para decirme que llevaba tres semanas buscándome con desesperación en la foto de Tunick en en Zócalo. Prometo no volver a reírme de la desgracia ajena.


Mejor fiesta

Mi fiesta de cumpleaños, por supuesto.


Mejor bebida

Coca-Cola, por supuesto.


Mejor platillo

El sándwich preparado en la redescubierta sandwichera.


Mascota favorita

Para qué le hago al tonto, todos los que me conocen saben que son Bambi y Byron. De vez en cuando Pix, el perro de una amiga, porque sabe decir "mamá". Y también los gatitos del Parque Hundido, no lo puedo negar.


Mejor prenda de vestir

Mis playeras de gatito que son como la American Express, no salgo sin ellas.


Mejor compra

Mis tenis para correr. A la semana me enteré de que los tenis en general no sirven y, al contrario, joden más los pies, pero aun así los amo.


Mejor noche

Estuvo tan buena que no la recuerdo.


Mejor actividad

Correr. Escribir. Preparar sándwiches. Tuitear.


Mejor aprendizaje

Un romance fugaz que tuve con un pendejo papanatas que quería ganar dinero hasta por ir a cagar. Aprendí que ser un yo-yo no deja nada bueno en la vida, sólo hace que la gente se vuelva pendeja y papanatas.


Mejor concierto

En realidad son tres: Muse, Pixies y Belle & Sebastian.


Mejor canción

Definitivamente, On Melancholy Hill, de Gorillaz.



Up on melancholy hill
There's a plastic tree
Are you here with me
Just looking out on the day
Of another dream

Well you can't get what you want
But you can get me
So let's head out to sea
'Cause you are my medicine
When you're close to me
When you're close to me

So call in the submarine
'round the world we'll go
Does anybody know
If we're looking out on the day
Of another dream

If you can't get what you want
Then come with me

Up on melancholy hill
Sits a manatee, love
Just looking out for the day
When you're close to me
When you're close to me

When you're close to me



Mejor momento

Cuando empecé a bajarle de huevos y sentí una felicidad genuina. Eso pasó hace aproximadamente tres meses.


Son pocas las cosas que incluyo en mi lista, pero a lo largo de este año fueron constantes, por lo tanto, al menos una vez al día me sentía feliz y estoy segura de que el año que llegará en menos de un día será todavía más pleno de momentos que me hagan sentir viva, pero sobre todo, que me hagan sentir dichosa.

Este año fue difícil, entre pérdidas, momentos horreeebles, personas que se fueron, amistades que terminaron y demás cosas, fue complicado salir avante, pero también fue complicado sentirme contenta. Hace pocos meses, en uno de mis tantos ratos de introspección, me di cuenta de que estaba cagándola terriblemente, que las cosas en verdad comienzan por lo más simple, y que si yo tanto predico que la simpleza acá y la simpleza allá, y que no hay que complicarse y yada, yada, debo comenzar por mí, por ser simple yo, por ser feliz yo y por descomplicarme yo. Así lo hice y me he sentido de maravilla, sin necesidad de una droga, sin estarlo pregonando a los cuatro vientos y sin la necesidad de usar un pin pedorro para que todos vean que así es.

Esta tranquilidad, esta felicidad que siento, no se irá, porque viene de un lugar muy profundo de mi alma, pero sobre todo, porque estoy convencida de ello, creo en ello y creo en mi persona. Me gusta ser simple y sentirme muy contenta por cosas mucho más simples, me gusta ser yo, y aunque a veces y en ciertos lugares no lo refleje, sé que me siento feliz por todo, por todos y por mí. Eso es lo que verdaderamente importa.

Que el próximo año sea más simple y, por lo tanto, mucho mejor.

Lau dixit.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Merry Christmas

No voy a decir que me caga la Navidad ni a autodenominarme "grinch" (otros ya lo han hecho e incluso tengo un post al respecto). Tampoco voy a decir que a los que les gustan estas fiestas son tontos o algo parecido. No diré nada de eso.

El motivo de esta entrada es desear que todo el mundo se la pase muy bien y que todo lo bueno de esta época sea una realidad que permanezca en lo que queda del año y en el que está por venir. No soy muy elocuente, pero tengo buenos deseos.



The Jingle Cats - White Christmas


¡Feliz Navidad a todos!

Lau dixit.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Letting go is freedom

A veces sólo hace falta abrir los ojos y ver lo claras que son las cosas...





Hay que dejar ir. Hay personas que desechan personas, y yo fui desechada. Hay que dejar de ser desecho. Hay que dejar ir.

Como dijo Ruy Xoconostle en una entrada de su blog, es necesario matar a un boss y pasar al siguiente nivel. En este caso, el boss me mató a mí, pero como en los videojuegos, puedo ganar vidas otra vez. Llegar a otros niveles. Las oportunidades son infinitas.

Xoconostle también incluyó en su post la frase que le da título a esta entrada. No puedo pasarme la vida lloriqueando por haber perdido algo que nunca tuve. Tengo que saborear esta libertad que implica el hecho de dejar ir. Todas esas palabras de afecto, todo eso que creí real ya se fue. Es la naturaleza de las cosas. Y entre más libertad le dé a esas cosas para que se vayan, mayor libertad tendré yo para escalar más y más niveles. Es triste, sí, pero necesario. Así debía ser y no de otra forma.

Te digo adiós. Te dejo ir. Empiezo a ser libre.





Lau dixit.