domingo, 17 de febrero de 2013

Dear Prudence


The sun is up, the sky is blue,
It's beautiful and so are you...

John Lennon


Ah, la prudencia, la maltrecha, la olvidada prudencia...

Qué días tan complicados, tan largos y tan feos han sido éstos. Me he sentido mal anímica y físicamente. Y es que cuando has estado tan acostumbrada a una cosa y de pronto te rebelas, algo se revuelve dentro de ti. Aún no sé cuál será el resultado de ello, pero sí sé que, definitivamente, estoy mejor que antes.

La acepción más común de la palabra prudencia es cautela, sin embargo, a mí me gustan más sus otros significados, como el de actuar de manera justa y adecuada, respetando la existencia, la libertad y los sentimientos de los demás.

No me gusta que los humanos traten mal a los humanos, y me incluyo en la generalización. Humillamos, sobajamos, criticamos, ofendemos, maltratamos y hacemos muchas cosas que afectan a otros de una manera negativa. Eso me duele, sobre todo porque sucede cuando estoy molesta. Me duele hacer sentir mal a las personas, porque sé que no sólo las lastimo a ellas, también me lastimo a mí.


Dear Prudence - The Beatles

Una de mis resoluciones de vida (que no de año nuevo) es ser más prudente, más justa con las personas. Tratar a los humanos como humanos. Tratarme mejor a mí misma. No soy una virtuosa, al contrario, estoy llena de defectos y manías, sin embargo, sí puedo hacer una diferencia. Los grandes fuegos se inician con una pequeña chispa.

La prudencia, la bella prudencia, me ha quitado la venda de los ojos y ahora todo es más claro. Para alcanzar las metas más nobles hay que recorrer los caminos más sinuosos y difíciles. Sé que lo que estoy pasando es cosa minúscula comparada con lo que me espera. Y no me importa, porque voy acompañada. La prudencia irá conmigo a partir de ahora.

Lau dixit.



No hay comentarios: