lunes, 8 de diciembre de 2008

AdSense


Hay ciertas cosas en la vida que no son casualidad.

Muchas veces oí a las personas decir que no se daban de alta en el AdSense porque no es muy provechoso que digamos y sí muy engorroso e inservible para algunos. Pues bien, yo no hice caso de lo que la gente dice (para variar) y me di de alta.

Obviamente todo te lo pintan muy maravilloso, pero la relalidad es otra. Y no es que quiera volverme millonaria ni nada parecido, porque sé perfectamente que hay otros medios para hacerlo y que quienes reciben cheques de Google forman parte de un selecto grupo de afortunados que han de postear las cosas más sublimes para tener anuncios útiles en sus blogs, porque debo mencionar que los anuncios que suben se relacionan con los temas de tus entradas. ¡Qué fiasco!

Como era de esperarse, mis anuncios son de uñas postizas, de maquillaje y de cientos de pendejadas que a nadie le interesan pero... ¡oh, por Dios! MI BLOG TAMBIÉN ESTÁ LLENO DE PENDEJADAS QUE A NADIE LE INTERESAN. De ahí la frase que abre este post: hay cosas que no son casualidad.

Con base en lo anterior, queda una pregunta al aire: ¿Tendré que dejar de postear tanta pendejada y escribir sobre cosas sublimes, etéreas y rebuscadas?

¡Naaaaa! Creo que sólo hay una cosa en la que me especializo en esta vida y es decir pendejadas (de manera oral o escrita), así que no voy a dejar de hacerlo, salvo en el caso de que descubra algún otro talento (que seguramente sucederá cuando llegue mi primer cheque de Google, o sea, va pa' largo).

Lau dixit.

1 comentario:

Oswald dijo...

Qué te pasa¡? a mi sí me gustó el post de las uñas postizas!! jajaja. Es más, hasta hubieras pasado como se degeneraban progresivamente con imagenes. jajaja.