miércoles, 3 de marzo de 2010

Stay (Faraway, so close!)

Stay, with the spirit I found...

Bono / The Edge

Para ustedes, L. y G. ...

Que me vea, que me oiga, que me hable, que me toque, que me desee, que me sienta, que me quiera... que se quede... Siempre esperamos alguna de esas cosas de una persona que sea objeto de nuestro afecto, pero no todas las veces sucede por una razón muy simple, misma que el señor Jorge Drexler menciona en una de sus canciones: todo se transforma.

El Universo cambia constantemente, y lo que un día es, al otro ya no existe. El movimiento es parte del cambio, y por ello nunca estamos en la misma posición y nunca volvemos a ser los mismos que fuimos en otra ocasión. Cuando alguien se va a acostar, tal vez tenga más peso, más cabello, más cansancio, más impresiones que al día siguiente que despierte; nunca somos los mismos, a diario sabemos una cosa más, olvidamos otra, experimentamos una nueva sensación, hacemos algún descubrimiento, probamos un sabor nuevo, vemos un cielo diferente al del día anterior y una larga lista de etcéteras. Así como Heráclito decía que no te puedes bañar dos veces en el mismo río, yo digo que día con día eres una persona distinta.

El año pasado una amiga muy querida organizó una reunión en su casa, a la cual asistieron tres amigos queridos más. Todo estuvo muy bien, fue un momento que en cierta manera nos unió y nos permitió saber más de cada quien. Recuerdo que hice una pésima combinación de alimentos y que me tomé una casi-botella de brandy, por lo tanto acabé teniendo una crisis etílica espantosa, la segunda de mi vida (y espero que la última), pero antes de todo ese show, cuando sólo quedábamos un amigo, mi amiga y yo, estábamos escuchando música y mencionando los títulos de las canciones, hasta que sonó la que da nombre a este post.

Cuando Bono comenzó a cantar, nuestras voces se unieron a la de él y cantamos con mucho sentimiento. No importaba si no nos la sabíamos, si washawasheábamos o si olvidábamos lo que decían algunas estrofas, fue un momento de empatía, de unión, de amistad y de alegría. Fue un momento en el que no podíamos pensar en nada más que el hecho de estar ahí, cantando, dejándonos llevar por la música y los sentimientos, pues seguramente cada uno de nosotros tenía una historia con esta canción y le vino a la mente. Yo, por ejemplo, recordé que en la secundaria un maestro hizo un juego de preguntas y castigos; si alguien no respondía bien, tenía que pasar por una prueba, que iba desde hacer alguna cosa ridícula hasta dar besos y demás cursilerías. Yo estaba en la lela y respondí una tontería, así que me tocó cantarle una canción de amor a un compañero. Obviamente, elegí Stay.

Al cantar con mis amigos, mi primer deseo fue que la amistad no terminara nunca y que estuviéramos unidos siempre; no nos hemos separado, pero las circunstancias han cambiado mucho y no convivimos tanto como antes. Hay muchas historias que se han tejido paralelamente y se ha modificado todo, sin embargo, el cariño ahí está, y pienso que aunque no haya más momentos similares, seguiremos ahí, transformándonos, transformándolo todo.

A continuación, el video y la letra de la canción:




U2 - Stay (Faraway, so close!)

Green light, Seven Eleven,
You stop in for a pack of cigarettes.
You don't smoke, don't even want to.
Hey now, check your change.
Dressed up like a car crash
Your wheels are turnin' but you're upside down.
You say when he hits you, you don't mind
Because when he hurts you, you feel alive.
Oh, is that what it is?

Red lights, grey morning
You stumble out of a hole in the ground.
A vampire or a victim
It depends on who's around.
You used to stay in to watch the adverts
You could lip synch. to the talk shows.
And if you look, you look through me
And when you talk, you talk at me
And when I touch you, you don't feel a thing.

If I could stay, then the night would give you up.
Stay, and the day would keep its trust.
Stay, and the night would be enough.

Faraway, so close
Up with the static and the radio.
With satellite television
You can go anywhere:
Miami, New Orleans
London, Belfast and Berlin.

And, if you listen, I can't call.
And, if you jump, you just might fall.
And, if you shout, I'll only hear you.

If I could stay, then the night would give you up.
Stay, and the day would keep its trust.
Stay with the demons you drowned.
Stay with the spirit I found.
Stay, and the night would be enough.

Three o'clock in the morning
It's quiet, there's no one around,
Just the bang and the clatter
As an angel runs to ground.
Just the bang and the clatter
As an angel hits the ground.

Casi todos queremos permanecer en esta vida, y que la gente que queremos permanezca con nosotros. La permanencia es algo difícil porque todo se transforma al igual que los seres humanos, aunque me gusta pensar que como tenemos la divina capacidad de elegir, podemos escoger transformarnos con las personas a las que amamos y enriquecernos con esas transformaciones para que todo lo que cambie sea aun mejor.

Faraway, so close! (In weiter Ferne, so nah!) es una película de Wim Wenders para la cual U2 prestó su canción. Cinco años después esta película tendría su versión gringa (City of Angels), que aunque visualmente no es tan hermosa como la primera ni tan parecida en cuanto a la trama, trata en esencia lo mismo: un ángel que renuncia a todo y se convierte en humano. A mí lo que más me gusta es ver a los ángeles sobre la Siegessäule (Columna de la Victoria), y me parece un buen detalle que para el video de la canción el grupo haya recreado esa y otras escenas de la película pero, independientemente de la belleza de las imágenes, creo que en ambas cintas se puede apreciar la transformación de la que todos somos objeto: un día se es un ángel, al otro día se es humano, al otro... cómo saberlo.

Alguien está contigo pero después puede irse; alguien te desea, pero el deseo se acaba al saber que ya no eres algo prohibido; alguien te puede hablar, y en un instante quedarse callado porque no hay nada más que decir; alguien te puede oír, pero en un segundo siente que no entiende tus palabras; alguien te puede ver, pero se intimida y aparta la mirada; alguien te puede tocar, pero en ese contacto se da cuenta de que estás demasiado lejos; alguien te puede sentir, pero tal vez no entienda la sensación y se aleje; alguien te puede querer, pero renuncia porque no sabe qué esperar; alguien puede quedarse, pero sabe que no será para siempre...

La permanencia no es algo que se dé muy a menudo, al menos no en este mundo. Es difícil que todo lo que vivimos permanezca, pero en nuestros recuerdos esto es posible. Todo se queda si uno decide que viva en la memoria, sobre todo aquellos momentos en los que lo mejor de la vida, lo mejor de TU vida, fue posible por un instante.

Los quiero, amigos míos, los quiero de verdad. Gracias por compartir esta canción conmigo.

Lau dixit.

1 comentario:

Sea lo que sea dijo...

Querida Lau,
Curiosamente hace unos días escuché esta canción muy temprano por la mañana en el radio. Y me acordé de esa noche que la cantamos. Ciertamente tengo más recuerdos ligados a esa canción y sin embargo el que me vino a la mente fue ése: tú, el Vite y yo cantando.

Sí, todo se transforma, como dijo mi querido Jorge Drexler. Y generalmente para convertirse en algo mucho mejor! Donde estemos, hagamos lo que hagamos e incluso sin estar cerca los unos de los otros, permaneceremos en nuestros recuerdos...

Un muy fuerte abrazo, Lau!